viernes, junio 09, 2006

Vaguito's party

Mañana por la noche tenemos fiesta en casa, ya están dispuestas en la heladera todas las latitas de refrescos, cervezas, vinos, y elementos bebibles necesarios para tal acontecimiento. Los elementos brindantes, como dice mi amigo Ramiro, en esta ocasión serán de plástico transparente y descartable, la vajilla ya está elegida, en el mismo material pero de colores rojo y azul. Será al estilo Vaguitos, por lo tanto, la cena consistirá en pizzas que vienen en moto, y que nos subirán hasta casita sin mover un músculo.

Tenemos diecinueve sillas, dos reposeras, un sofá de tres cuerpos y una mecedora por lo que le dijimos a nuestros amigos, los últimos que se apuntaron a venir, que lleguen munidos de su sillita de playa. Esta es la cuarta vez que hacemos fiesta masiva, nos gusta, bueno, en realidad me gusta más a mí que a Xavito. El es más de cenitas íntimas, con cuatro o cinco personas le sobra. Yo busco la popularidad, me gustan las masas, por eso, cada vez que organizo algo en casa, no somos menos de treinta personas.

Compré un vodka de diseño, que no sé como sabe, pero tiene un estuche con un holograma de rosas, y según como lo mires aparece la marca de la bebida.

Hoy Xavito trajo más libros a casa, ya está pareciendo nuestra, el mueble del comedor está colmado de literatura de todos los géneros, colores y tamaños; están mezclados con velitas de colores, un espacio especial para refugiar las botellas que serán cubatas para nuestros amigos y un rincón dedicado a los discos que también se basan en gustos nuestros y ajenos, se puede encontrar con solo abrir una puertita a George Benson, Rita Pavone y hasta Conchita Velasco y su chica Yeah Yeah.

Para mañana seguramente se apuntarán más, Manolo dijo que traería su brebaje caribeño para los postres, Sharon un cava y a los demás les gusta el efecto sorpresa, igual que a nosotros que ya veremos donde encajamos a todo el personal.

En la fiesta que montamos en Marqués de la Ensenada, teníamos una jaima de tres por tres para meter a los invitados, no calculamos que a la gente le gusta moverse después del segundo cóctel. Así fue que perdimos el control de la juerga. Veíamos como la gente llamaba a otra gente y al ver la puerta abierta subían sin pedir permiso. El final fue caótico y alegre. Caótico porque nos tocaba recoger todo el efecto pub que quedó por un lado y alegre porque vimos que nuestros amigos se lo habían pasado bien . Colillas por el suelo, pisaditos y bien apagados, eso sí. Vasos de plástico en cada rincón de la casa, en esa ocasión no eran transparentes por lo que nos fueron de fácil localización. Bollitos de papel tisue como si una guerra de servilletas hubiera tenido lugar.

La cuestión es divertirse, así que ya estoy preparada para la noche del viernes. Tengo ganas de pasar una velada entre cajas de pizza y corchos de botellas.

1 comentario:

Anónimo dijo...

30 PERSONAS EN LA CASA DE XAVITO ????????
JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA
NO ES MUCHO PARA EL " MONJE XAVI " ????????
VENITE PARA BUENOS AIRES !!!!!!!!
PERO ADEMÁS...............
COMO LOS ENVIDIOOOOOOOOOOOOOOOOOO
SALUDOSSSSSSSS